Fotografia d’un Sadhu, Ramon Mascort Amigó

Para Ramon Mascort, mostrar públicamente una obra tan personal como es la fotografía, es desvelar un acto íntimo. Cada instantánea conlleva un fugaz pensamiento previo sobre lo que pretende conservar de los fragmentos de vida que pasan por delante, seguido de una decisión, muchas veces rápida, para evitar la fuga, tanto de la expresión de un sentimiento, como la de un momento de especial significado, belleza o armonía, física o espiritual.

Esta fotografía, tomada a un Sadhu (asceta que busca la purificación de su alma mediante la negación de los bienes materiales) en la India, es un claro ejemplo de que Ramon Mascort quiere demostrar su gratitud y feliz recuerdo a todas las personas que, en sus viajes, han aceptado su mirada emocionada a través de una cámara fotográfica.